Tener una planta de pimientos en casa es posible y no requiere de grandes esfuerzos, además de ser altamente rentable debido al elevado costo que suele tener este vegetal durante algunos momentos del año.
Los meses ideales para comenzar a sembrar pimientos es en julio y agosto, para que llegada la primavera las plantas estén en óptimas condiciones de desarrollo.
En este artículo vamos a ver toda la información que precisas para poder tener una planta de pimientos en casa, sea en maceta o en tierra. ¡Toma nota!
El cultivo de la planta de pimientos
La temperatura
Se desarrolla en temperaturas que oscilan entre 18 y 22ºC, pero crece con mayor fuerza cuando rondan los 20-25ºC durante el día y no menos de 16-18ºC por las noches.
Cuando acontece mucha diferencia de temperaturas entre el día y la noche, las plantas de pimientos pueden tener problemas en la floración, y por otro lado, cuando hace demasiado calor pueden caerse tanto las flores como los frutos.
El pimiento es sensible al frío y a las heladas, su crecimiento se retarda cuando la temperatura baja de los 15 grados. Y si se los siembra en sectores de frío, los frutos nacen pequeños y deformes, por ello para evitar esto se cultivan bajo cubierta.
Otro detalle a considerar es la orientación del lote ya que la planta necesita de muchas horas de sol, en especial durante el comienzo del cultivo y la floración.
Los requerimientos del suelo
Esta planta se desarrolla en condiciones óptimas cuando el sustrato tiene un pH neutro, entre 6,5 y 7. El suelo debe ser profundo, rico en materia orgánica y con alta cantidad de nitrógeno, pero ligeramente arenoso.
Si la tierra es demasiado densa o arcillosa tiende a generar anegamientos, y esto puede causar enfermedades.
Trasplante
El cultivo se realiza en almácigos, tanto en el suelo como flotantes. También puede sembrarse directamente en maceta cuando se los cultiva en casa.
A los dos meses de la siembra la planta puede ser trasladada a su lugar definitivo, y durante este periodo hay que prestar atención ya que es susceptible a una enfermedad llamada Dumping Off, generada por hongos presentes en el suelo.
Una vez trasplantada la planta se la debe tutorar, porque el tallo es aún muy débil y requiere de una guía para crecer erguido hasta cobrar la fuerza necesaria.
Riego
La planta del pimiento necesita que el sustrato siempre esté húmedo pero no encharcado, por lo tanto un buen truco para mantener en óptimas condiciones el suelo es colocar hojarasca, piedras o paja que ayuden a conservar la humedad y el calor en las raíces.
La cosecha de la planta de pimientos
El fruto estará listo para su cosecha cuando hayan pasado unas 12 a 14 semanas del trasplante, y el mismo se puede recolectar cuando está aún verde, rojizo, naranja o amarillo.
Plagas comunes del pimiento
Araña Roja: se caracteriza por generar puntos amarillos en las hojas, y cuando la enfermedad avanza se visibilizan caminos de seda que crean los ácaros para desplazarse por la planta-
Araña Blanca: los síntomas son parecidos a los de la araña roja, pero también afecta los tallos.
Pulgones: son insectos que afectan muchas hortalizas, se combaten con jabón potásico, pero si la infección es muy grande hay que recurrir a insecticidas químicos.
Mosca Blanca: es un insecto capaz de arruinar una plantación entera. Estas moscas diminutas son difíciles de combatir, x lo que es mejor prevenir su aparición.
Orugas de polillas: su gran tamaño y hambre voraz hace que puedan acabar con una planta en solo una noche. La solución es extraerlas o utilizar insecticidas.
Caracoles y Babosas: pueden causar destrozos, para detectarlos basta con mirar si se ven rastros brillantes en el suelo, tallo y hojas.
Trips: son muy dañinos. Afectan el envés de las hojas y pueden hacer caer las flores. Se combaten de forma ecológica con jabón potásico, trampas cromáticas azules y aceite de parafina.
Enfermedades y hongos del pimiento
Podredumbre: causada por diversos hongos, generan lesiones en las hojas y flores, los frutos se ponen blandos y se caen. Estos hongos se combaten con Sulfato de cobre o fungicidas químicos.
Roña o Sarna Bacteriana: causada por una bacteria, muy difícil de combatir, por lo general la planta dañada no se salva. La zona ha de ponerse en cuarentena y no plantar nada más hasta su desinfección.
Seca o Tristeza: El pimiento se marchita de forma muy rápida, al punto de que muere antes de ponerse amarillenta. Se combate con fungicida.
Oidio: un hongo muy habitual que se combate con funguicidas.
Fuentes: Casafe, La huertina de toni