El osmanto dulce (Osmanthus fragrans), también conocido popularmente como olivo fragante, olivo dulce u osmanto oloroso, es una planta orginaria del continente asiático y cuyo cultivo como planta ornamental se ha extendido al resto del mundo, gracias al exquisito aroma de sus flores.
Este arbusto perteneciente la familia de las Oleáceas puede crecer hasta alcanzar de 2 a 12 metros de alto. Sus hojas, perennes, son elípticas a oblongo-lanceoladas, acuminadas, de hasta 15 centímetros de largo por 5 centímetros de ancho, enteras o serradas, y coriáceas.
La inflorescencia suele tener lugar entre finales del verano y comienzos de otoño. Se compone de ramilletes axilares de las hojas con flores de color blanco, crema, amarillo o naranja, con corola de 5 milímetros de diámetro con cuatro pétalos de 1 centímetro de largo. Producen una fuerte y agradable fragancia que desde tiempos antiguos es usada por los chinos para aromatizar el té, razón por la cual la planta también es conocida como «olivo de té».
El fruto del osmanto dulce madura aproximadamente a los seis meses de producida la floración. Es una drupa de color púrpura-negro, cuyo diámetro puede varias de 10 a 15 mílimetros, y en su interior contiene una sola semilla de cáscara dura.
Como se señaló anteriormente, los ejemplares de esta especie suelen aprovecharse como plantas ornamentales, y se los puede ver en jadines u otros espacios verdes formando setos o cultivados como ejemplares aislados. También pueden desarrollarse en maceta.
Respecto de sus condiciones de cultivo, el osmanto dulce necesita estar ubicado en sitios con sol intenso, aunque también puede crecer y desarrollarse bien en lugares con semisombra. Debido a que no soporte el frío intenso, se deben tomar las medidas necesarias para protegerlo de las heladas, sobre todo en las regiones más frías.
También es recomendable cultivarlo en sitios que estén a cubierto del viento.
La multiplicación del osmanto dulce puede hacerse por esquejes durante el verano, a la sombra y bajo campana que proteja a las plántulas del viento o de la lluvia, al tiempo que aumente la temperatura del aire y del suelo alrededor, hasta que las condiciones meteorológicas sean propicias. Antes de retirar la cobertura es conveniente aumentar la ventilación durante algunos días para que las plantas se aclimaten.
Osmanto dulce: Necesidades de suelo y riego
En cuanto a sus requerimientos de suelo, es una planta muy agradecida cuando se cultiva en sustratos ácidos con una buena disponibilidad orgánica y con un buen drenaje. Esto último puede garantizarse con la incorporación de arena.
El osmanto dulce necesita ser sometido a un riego regular un par de veces cada diez días, aumentando la frecuencia del mismo según las condiciones atmosféricas y la permeabilidad del terreno.
