El “huerto de ventana”, o “window farm”, es un método de cultivo hidropónico iniciado en los EE.UU., que fomenta la producción de alimentos orgánicos en aquellas viviendas que carecen de espacios libres, basándose en la utilización de materiales reciclables y el aprovechamiento de la luz, la ventilación y la temperatura constantes que se registran en las ventanas.
Básicamente, se trata de un huerto vertical conformado por una columna de botellas plásticas dispuestas al revés y conectadas unas a otras, con las plantas que salen a través de los agujeros practicados a los costados de los envases, mientras una pequeña bomba de aire se encarga de hacer circular nutrientes líquidos que gotean hacia abajo desde la parte superior de la columna y se abren camino a las raíces de las plantas.
La configuración ideal para quienes desean iniciarse en esta técnica de cultivo utiliza tres botellas plásticas que actuarán como sostenes de sendas plantas, todas ellas interconectadas a un contenedor o botellón de 4 litros en la base, que sirve como depósito del agua impregnada de nutrientes, que sube a las botellas a través de un tubo.
Para facilitar el mantenimiento del sistema, se puede hacer que el trabajo de la bomba de aire trabaje con mayor eficiencia incorporándole un temporizador que establezca ciclos periódicos para la aplicación del agua. Se recomienda volver a llenar el botellón con agua y nutrientes líquidos una vez por semana.
Como puede verse en el gráfico, la tierra y la planta deben colocarse en una maceta tipo rejilla, dado que si se ponen directamente en la botella el crecimiento de las raíces puede ocupar totalmente la parte inferior del envase, llegando a generar obstrucciones en el flujo de agua, y a interrumpir también el paso del aire.
Por ese mismo motivo, los huertos de ventana no pueden utilizarse para el cultivo de hortalizas de raíz, como zanahoria, papa, ajo, puerro, etc., siendo más adecuados para la producción de hortalizas de hoja (como lechuga), y distintos tipos de herbáceas (pimiento, tomate, frutilla,menta, etc.).
Si se desea que la circulación y goteo del agua sean lo más silenciosos posible, se puede tomar una pequeña botella (como las que se usan para las vitaminas), hacerle al menos dos perforaciones en la base y colocarla en el extremo del tubo de la vía aérea que desemboca en la botella superior.
En aquellas zonas o temporadas en que la luz que se recibe a través de la ventana resulta insuficiente, se puede armar un dispositivo de iluminación artificial con lámparas fluorescentes compactas (CFL).