Originaria de una de las Islas Comores, en el sudeste de África, la Impatiens auricoma es una especie perenne o anual (en climas templados) cuya alegre y colorida floración puede iluminar cualquier zona oscura o sombreada de un jardín, ya sea que se cultive directamente en el suelo o en contenedores.
Esta planta ornamental, que puede medir entre 30 y 90 centímetros de alto, se presenta como un sub-arbusto de tallos quebradizos y suculentos. En zonas con predominio de climas fríos algunos ejemplares pueden presentarse como herbáceos.
La Impatiens auricoma se caracteriza por su floración, que tiene lugar durante todo el verano e incluso pude prolongarse durante las etapas tempranas del otoño. Sus flores tienen un aspecto similar al de las orquídeas, son de color amarillo brillante con manchas burdeos en la garganta y pueden convertirse en un interesante complemento a los contenedores, donde la planta acostumbra florecer más profusamente que si fuera cultivada en el suelo.
Los ejemplares de esta especie son resistentes a las heladas suaves y prefieren sol o media sombra con tierra húmeda pero no mojada. Se pueden propagar por semillas o por estacas en la primavera o el verano.
También se puede comprar una Impatiens auricoma ya arraigada en un vivero o florería. En ese caso es importante mantenerla bien regada hasta que se la trasplante a su lugar definitivo, ya que se trata de especímenes muy sensibles a la falta de agua y pueden marchitarse rápidamente.
Estas plantas disfrutan de un sustrato húmedo pero bien drenado, y de la sombra parcial a profunda. El momento indicado para su plantación en el jardín es una vez que el peligro de las heladas haya pasado.
Para plantar una Impatiens auricoma, se debe apretar suavemente el contenedor en el que vino para aflojar la tierra, luego se invierte el recipiente en la mano y la planta debe salir con facilidad. A continuación se la coloca en un agujero en la tierra, al menos tan ancho y profundo como el cepellón, que es la masa de tierra que se deja pegada a las raíces para el trasplante.
La planta debe asentarse en el mismo nivel en el suelo como lo estaba en el recipiente original. Se rellena suavemente el agujero y se riega profundamente. Se pueden plantar ejemplares de Impatiens auricoma dejando poca distancia entre ellos (alrededor de 30 centímetros), ya que mientras más cerca se encuentren, más rápido crecerán para formar un macizo de flores en el jardín.
Impatiens auricoma en macetas: Riego
Cuando la Impatiens auricoma se cultiva en macetas se necesitará un riego diario e incluso dos veces al día cuando la temperatura ambiente supere los 29°C.
Para un mejor rendimiento, se recomienda fertilizar estas plantas solubles al agua cada dos semanas durante la primavera y el verano. Si se van a usar fertilizantes de liberación lenta, lo mejor es aplicarlos a comienzos de primavera y una vez más a mediados del verano.