El cactus de Pascua (Hatiora gaertneri) es una cactácea endémica de Brasil cuyo cultivo como planta ornamental se ha extendido a prácticamente todo el mundo, debido a la belleza de su floración que tiene lugar una o dos veces al año y a que se trata de una especie de fácil cuidado.
En las selvas tropicales de donde es originaria, esta suculenta suele crecer en los árboles (epifitas) y con menos frecuencia en las rocas (litófitas). Con la madurez se convierte en un arbusto colgante sin hojas, ramificado con un fondo leñoso. Los tallos se componen de segmentos, la mayoría de los cuales son aplanados. Los segmentos más pequeños son de color verde y miden hasta 7 centímetros de largo por 2,5 centímetros de ancho, con pequeñas muescas en los márgenes.
Las atractivas flores del cactus de Pascua se forman a partir de areolas en los extremos de los tallos. Son de color escarlata oscuro (aunque hay cultivares con otras tonalidades) y pueden medir hasta 5 centímetros de longitud y 7,5 centímetros de diámetro, con forma de embudo. Los frutos que les siguen son alargados y de color rojo.
Como se dijo previamente, las plantas de esta especie son fáciles de cultivar y de multiplicar. Siendo el principal desafío no cómo hacer que crezcan, sino cómo lograr que florezcan y se luzcan en las macetas o jardines. Con un poco más de atención durante los meses de otoño, se pueden obtener tener plantas en flor para pleno invierno.
A pesar de que crece sin dificultades en ambientes fríos, debe tenerse cuidado de no exponer al cactus de Pascua a temperaturas de congelación. La temperatura recomendada de verano es de alrededor de 25 ° C con temperaturas más bajas de 7 a 13 ° C en el invierno para iniciar una buena formación de brotes.
Estas plantas son muy agradecidas si se crían en ambientes donde impera un régimen del 50 a 60 por ciento de humedad, lo que en el caso de los especímenes que se cultivan en interiores se puede lograr usando una bandeja de guijarros.
Otra recomendación para el cuidado del cactus de Pascua es evitar su ubicación cerca de la calefacción, puertas que den al exterior, o ventanas con corrientes de aire, y mantenerlas fuera de la luz intensa del sol. Se recomienda que estén bajo media sombra y pueden ser colocadas en un lugar protegido en el exterior durante el verano.
Cactus de Pascua (Hatiora gaertneri)
En cuanto al riego, el cactus de Pascua puede responder mal tanto al exceso como a la insuficiencia de agua, pudiendo sufrir la pérdida de segmentos del tallo. Se recomienda mantener el suelo húmedo (se puede comprobar enterrando la primera falange del índice en la tierra), pero evitando los encharcamientos.
La multiplicación de esta planta suculenta se puede realizar a partir de los segmentos del tallo que pueden ser quitados a finales de la primavera y se dejan secar antes de ser colocados en un sustrato ligeramente húmedo.
