La Euphorbia palustris es una planta suculenta perenne originaria de Europa y Asia que puede aprovecharse como un atractivo ornamento en jardines con alto contenido de humedad en la tierra.
Los ejemplares de esta especie son de rápido crecimiento, alcanzando el metro de altura en dos años. Su inflorescencia se presenta en ciatos, que tienen la apariencia de ser una única flor, pero que en realidad consta de varias brotes agrupados.
Estas estructuras comienzan a aparecer en primavera son de color verde, pero se vuelven amarillas a medida que avanza la estación.
La Euphorbia palustris tiene una particular característica que la convierte en un excelente complemento decorativo en jardinería: Sus hojas lucen un color diferente para casi todas las estaciones del año.
En efecto, a medida que se suceden la primavera, el verano y el otoño, el follaje va cambiando de verde a amarillo y luego a naranja antes de morir hasta el año siguiente.
Si se desea cultivar plantas de esta atractiva especie, debe tenerse en cuenta que crecen mejor en lugares soleados o con semisombra. Puede resistir temperaturas muy bajas y como contrapartida le cuesta desarrollarse en los ambientes secos y calurosos.
La multiplicación de la Euphorbia palustris se puede llevar adelante en verano por semilla o por esquejes. En el primer caso, es recomendable enterrar la simiente en un sustrato rico y convenientemente regado y mantenido.
El suelo más adecuado para la Euphorbia palustris debe ser bien drenado, ligeramente ácido a ligeramente básico, y rico en materia orgánica.
En su medio natural, esta planta crece sobre todo en zonas pantanosas, por eso es importante que el sustrato del jardín en el que se cultiva se mantenga permanentemente húmedo, aplicando un riego frecuente y abundante, pero siempre cuidando de no provocar grandes encharcamientos.
Cuando la Euphorbia palustris se cultiva en un lugar con semisombra, no se necesita mantener un riego continuo debido a que el proceso de evaporación del agua es más lento.
Euphorbia palustris: Fertilización equilibrada
La época indicada para la fertilización de la Euphorbia palustris es la primavera aplicando un abono equilibrado, siendo el compost y la turba las más adecuadas para esta labor debido a su aporte de materia orgánica.
Como todos los integrantes de la familia Euphorbiaceae, esta planta es tóxica y posee una savia muy pegajosa que puede causar irritación. Por ese motivo se aconseja utilizar guantes para su manipulación y mantenerla alejada de niños y mascotas.