El poroto pallar (Phaseolus lunatus) es una especie originaria de Centroamérica que en la actualidad es cultivada en diversos países cálidos y templados con el fin de consumir su semilla comestible, que es la alubia blanca.
Es una especie trepadora perenne de clima templado cálido, anual y de rápido crecimiento. Desarrolla una cabellera radical poco profunda, con una raíz pivotante de la que parten raicillas secundarias, muy ramificadas y profusas.
Posee un tallo estriado y herbáceo, glabro a escasamente pubescente, que se adhiere al tutor, enroscándose en un movimiento dextrogiro, es decir, en sentido contrario a las agujas del reloj.
Las hojas de la planta del poroto pallar son pinnadas y trifoliadas a partir del tercer par, de forma lanceolada con el ápice acuminado.
Las flores son de varios colores, aunque suele predominar el blanco, y se encuentran reunidas racimos axilares o terminales dependiendo del cultivar.
El fruto del poroto pallar es una vaina oblonga, falcada, de 6 centímetros de largo por 1,5 centímetros de ancho, con una sutura en ambos costados y dehiscente (se abre de forma espontánea para dispersar su contenido) cuando llega a la madurez. En su interior puede contener de 3 a 6 semillas ovaladas, cuadradas o ariñonadas.
Al igual que las otros porotos, esta especie es muy sensible a las heladas en todas las etapas de su desarrollo. La temperatura media mensual óptima para su cultivo varía de 16ºC a 20ºC con una temperatura mínima de 10ºC y máxima de 27ºC.
Los vientos cálidos y secos pueden ser perjudiciales para el poroto pallar, debido a que provocan la caída de flores y dificultan el proceso de polinización. Asimismo, los altos niveles de humedad y temperatura pueden estimular la aparición de enfermedades fúngicas.
Esta planta leguminosa puede crecer sin problemas en suelos de diferente calidad, aunque puede ser más productiva si se cultiva en un sustrato suelto, bien labrado y drenado, y enriquecido con materia orgánica (si es estiércol de caballo, mejor).
Otro punto importante a tener en cuenta cuando se cultiva poroto pallar es la temperatura de la tierra, ya que un nivel inferior a los 15ºC hará que la semilla del poroto pallar no germine, mientras que una temperatura de 27ºC será la óptima para una germinación rápida.
La siembra se hace una vez que pasó el peligro de las heladas, distribuyendo las semillas directamente sobre surcos separados entre sí por un espacio de 50 a 70 centímetros. Se entierran tres semillas cada 30 centímetros a una profundidad de 4 centímetros.
Cuando las plántulas de poroto pallar alcanzan unos 15 centímetros e altura, se puede proceder a entutorar.
El riego es importante, principalmente entre la tercera y cuarta semana de desarrollo de la planta, que coincide con la etapa de prefloración.
Una vez cosechadas, las aluvias de poroto pallar que se extraigan deben ser sometidas a una cocción de alrededor de cuarenta minutos para poder ser consumidas, ya que de este modo se logra que tengan una textura suave y untuosa que se deshace en el paladar. Esto también sirve para destruir las sustancias tóxicas que forman parte de su contenido.
