La Platycodon Grandiflorus, conocida popularmente con campanilla china, es una especie perenne monotípica de la familia Campanulaceae originaria del nordeste de Asia- donde se cultivaba en la antigüedad para uso medicinal- que ahora se encuentra muy difundida como una planta ornamental de destacada belleza y prolongada floración, que no requiere cuidados especiales.
Estas plantas forman un montículo de follaje verde y presentan brotes inflados que se abren en flores con forma estrellada de color azul, aunque también pueden hallarse algunas variedades con pétalos blancos o rosados.
La Platycodon Grandiflorus son fáciles de cultivar a través de semillas que se plantan sobre todo en primavera y se adaptan a todo tipo de terreno (andenes, canteros, jardines de piedra, macetas, etc.), aunque la planta crece mucho mejor si aquél está ligeramente húmedo y con buen drenaje, fresco, orgánicamente enriquecido y calcáreo. También resulta conveniente que el sitio de cultivo se encuentre semisombreado.
El período de floración de esta especie de planta se produce por lo general durante todo el verano, requiriendo durante ese tiempo un riego frecuente pero no copioso, que mantenga la tierra con un cierto grado de humedad constante. Cuando se cultiva en maceta, se aconseja regar la planta en un platillo y procurar que la capa superior de la tierra esté húmeda.
Para que la Platycodon Grandiflorus pueda ofrecer una temporada de floración más prolongada, se acostumbra retirar las flores marchitas. También resulta conveniente cortar los tallos secos e incorporar abono organomineral con ligeros trabajos superficiales en forma periódica.
Cuidados en el cultivo de la campanilla china
En cuanto a las amenazas que pueden afectar el desarrollo normal de la Platycodon Grandiflorus, debe recordarse que, si bien posee cierta resistencia a las heladas, es recomendable protegerlas con algún medio de cobertura.
No existen plagas de insecto específicas contra esta especie de planta, aunque eso no significa que no se deba prestar atención a la aparición de signos que revelen la presencia de babosas, caracoles, arañitas rojas o áfidos.
Otro cuidado que debe tenerse en cuenta cuando se cultivan ejemplares de Platycodon Grandiflorus es evitar el uso de suelos excesivamente húmedos, ya que estos pueden llevar a la pudrición de la raíz y la consecuente pérdida total de la planta.