El geranio de hiedra (Pelargonium peltatum), también conocido como malvón hoja de roble, es una especie perteneciente a la familia de las Geraniáceas nativa del Sur de África y es la más cultivada de su género.
Esta planta es un subarbusto de ramas delgadas, rastreras o colgantes. Sus hojas, algo suculentas, son delgadas y peltadas, es decir, su pecíolo no se une a la lámina por el borde como en casi todas las especies, sino perpendicularmente en un punto sobre el medio del envés en forma de hiedra.
La inflorescencia del geranio de hiedra consiste en una umbela compuesta generalmente por 2 a 9 flores de color rosa, con 5 pétalos oscuros y rayados. Las hojas más pequeñas de la planta son comestibles, de sabor agrio y propiedades astringentes.
Esta especie florece durante todo el año en las regiones libres de heladas.
Existen variedades que se diferencian principalmente por el color y forma de la flor, y por la durabilidad de la floración.
El geranio de hiedra resulta muy adecuado para su cultivo en sitios soleados, en contenedores en balcones y terrazas para que los tallos y las racimos florales pendan libremente en el aire, causando un efecto de colorida cascada.
También puede utilizarse como cubresuelos y apoyante que, cultivado en espaldera, puede supear fácilmente los dos metros de altura.
Se trata de una especie de fácil cultivo que necesita una exposición soleada o semisoleada, y algo protegida durante las horas centrales del día en plena temporada estival.
El geranio de hiedra no tolera las heladas persistentes, por lo que en aquellas zonas con inviernos crudos es conveniente tomar las medidas necesarias para protegerlo del frío extremo.
Esta especie soporta suelos con poca fertilidad y con poca humedad, pero no los que se inundan o los muy pesados con exceso de agua.
Los sustratos recomendados para un mejor crecimiento y desarrollo son aquellos ligeramente ácidos y sueltos. No es conveniente enriquecer demasiado el suelo, ya que esto puede dar lugar a especímenes con hojas grandes y floraciones escasas.
Una mezcla que puede funcionar bien con el geranio de hiedra es la compuesta por partes iguales de arena y resaca con sólo un 3 o 4 por ciento de materia orgánica, y con un pH ideal de 6,5
En cuanto a sus requerimientos de agua, es necesario regar sólo cuando la tierra esté seca. Si se desea estimular la floración se puede someter a la planta a un poco de sequía.
Geranio de hiedra: Poda y multiplicación
El geranio de hiedra puede tolerar las podas, incluso las drásticas, y se recupera con facilidad. La planta se debe podar a fines del invierno.
La propagación de esta planta se puede hacer por esquejes de unos 10 centímetros de largo que se introducen en macetas protegidas del sol y se riegan a fondo, suspendiendo luego el agua hasta que se observen los primeros brotes.