Las Fucsias constituyen un género de plantas exóticas que generalmente se desarrollan como arbustos, y se caracterizan por la belleza de sus floraciones, la facilidad de su cultivo y su habilidad para adaptarse a casi cualquier zona climática. De todas sus especies, la Fuchsia Magellanica y sus híbridos derivados son las más conocidas y utilizadas para ornamentar ambientes exteriores e interiores.
La reproducción de la Fucsia se puede realizar por semilla o a partir de esquejes, aunque el primer método resulta menos usado, en virtud de que no es la forma más fiable de reproducirlas. Debe tenerse en cuenta que la mayoría de las plantas del género que hay en nuestros jardines son híbridas, por lo que genéticamente no se garantiza que de la semilla que se siembre se genere la misma variedad.
Si aún así se desea producir Fucsias a partir de semillas, las mismas pueden adquirirse en tiendas del rubro o directamente desde los frutos maduros de la planta.
La reproducción asexual de estas plantas se puede realizar por esquejes blandos, en invernaderos o leñosos, dependiendo de la especie o cultivar que se desea obtener. El sistema de propagación con esquejes leñosos es recomendable, por ejemplo, para aquellas Fucsias que son más susceptibles a los hongos que atacan principalmente hojas y brotes tiernos.
Otra alternativa más sencilla recurrir a los viveros y comprar ejemplares pequeños en primavera. Una vez obtenidas las plántulas, se las debe ir adaptándolas de a poco en el sitio donde se tiene previsto ubicarlas, proporcionándoles mucha luz y humedad.
Fucsia: Riego
En todos los casos, es muy importante que los cultivos se realicen en suelos ricos, bien drenados y con un alto nivel de humedad. Sin embargo, es importante tener en cuenta que, si bien las Fucsias son un cultivo que necesita una elevada cantidad de agua, hay que administrarla poco a poco, en pequeñas dosis y evitando encharcamientos que favorezcan la pudrición de las raíces.
Si la planta se ve decaída, flácida y sin brillo, es señal de que la misma requiere un urgente riego a fondo. Lo mismo sucede cuando al tocar las hojas se nota que las mismas están blandas y templadas.
Fucsia: Enfermedades y Plagas
Las Fucsias son vulnerables a los ataques de los hongos de la especie Pucciniastrum epilobi, que pueden causar la aparición de la roya, una enfermedad que provoca el debilitamiento de la planta, la pérdida de su floración, e incluso su muerte. Otro mal que afecta a este género es la botritis, que suele aparecer en esquejes y plantas adultas cuando son cultivados en condiciones inadecuadas de ventilación. Para prevenir y combatir ambas enfermedades, se recomienda recurrir al uso de fungicidas.
Por otra parte, el listado de insectos que pueden representar una amenaza para el crecimiento normal de las Fucsias incluyen a la mosca blanca,pulgones, cochinillas, minadores de hojas y trips.
