Cómo diseñar un parterre en el jardín

La inclusión de un parterre en un jardín puede representar la mejor solución para agregarle un punto focal de color y textura que rompa con el verde monótono del césped y le otorgue más profundidad y equilibrio. Si bien estos lechos de flores y hierbas se caracterizan por la relativa facilidad de construcción y mantenimiento, requieren un diseño previo para sacar mejor provecho de sus cualidades estéticas.

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La forma más usual escogida para la construcción de un parterre es similar a la de un riñón, debido a que sus líneas amplias y curvas le dan un aspecto más natural y orgánico, que se integra más fácilmente con el resto del jardín, aunque sus dimensiones pueden variar debido a varios factores, como la distancia que hay entre la casa y el parterre, la extensión total del terreno, la altura de las plantas que se quieren cultivar, etc.

Una vez que se ha definido la ubicación, la forma y el tamaño del lecho, se realiza el trazado del diseño elegido sobre el terreno con la ayuda de plantillas de madera, una cuerda o una manguera que servirán de guías. A continuación, con una pala o una asada se procede a excavar el borde del parterre, que deberá medir entre 13 y 25 centímetros de ancho, y 10 centímetros de profundidad.

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Sobre el espacio interior del diseño, se debe colocar algún tipo de barrera temporal contra las malas hierbas que  puedan competir y afectar el crecimiento de las plantas que se van a cultivar en el parterre. Para ello, se debe recurrir al uso de materiales degradables como papel de diario o cartón para armar una capa que será cubierta con la misma tierra que se obtenga del cavado del contorno, y sobre la cual se procederá a su vez a colocar una capa de compost, el mantillo superficial y las plantas.

Para preservar la integridad del parterre de la invasión de especies vegetales no deseadas o para mantener definidos los contornos del lecho, se puede colocar a lo largo de todo el borde una malla antihierba, la que puede cubrirse con algo de tierra, o bien con piedras o ladrillos (si se decide construir un muro de contención), cortándose el material que sobre. Otra opción esa aprovechar la zanja para construir un borde de concreto, usando madera contrachapada como molde sobre el cual se verterá la mezcla.

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El siguiente paso será plantar las especies que se desean contener en el lecho, buscando combinar tamaños, colores, texturas, formas y contrastes para que tenga un aspecto atractivo y equilibrado, siendo muy útil para esto el truco de dividir el parterre en tres partes.

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Ruben
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