El bonsái es un arte asiático que data de siglos de antigüedad, y su realización implica tiempo, dedicación y paciencia.
No se hace de un día para el otro, y hace falta informarse mucho antes de proceder para poder conseguir resultados satisfactorios y no perder la planta elegida en el intento.
Breve guía para hacer un bonsái en casa
La elección del árbol
Existen dos maneras de comenzar a hacer un bonsái, una es comprando un árbol pre bonsái (que está listo para ser podado y alambrado), o bien tomando un árbol cultivado desde semilla o esqueje, y aplicándole diversas técnicas de formación.
Cuando el bonsái se hace a partir de un árbol cultivado, deben pasar al menos 3 años (a veces 5) para que el árbol pueda ser modelado por completo.
Otro detalle es que hay que elegir la especie de árbol que mejor se adapte a las condiciones del clima, teniendo en cuenta si se lo tendrá dentro o fuera de la casa. Una apuesta que nunca falla es ir por un árbol autóctono.
La maceta
La maceta en donde se coloque la planta es determinante, siempre ha de ser poco profunda y con buen drenaje.
Un dato curioso es que los japoneses usan la técnica Lo-Shu para elegir donde plantar el árbol, esta divide virtualmente la maceta en 9 cuadros que representan la armonía del cosmos. La suma de cada fila y columna da 15.
Suelen elegir algún sitio en las intersecciones 9, 2, 5 y 7, nunca en el centro de la maceta ya que para ellos es el lugar de Dios.
Esta técnica también la emplean para determinar las proporciones del árbol, eligiendo los números de la fila 2 de derecha a izquierda (7:5:3) que determina al altura del árbol, copa y tallo.
El sustrato
La tierra tiene que ser suelta y tener buen drenaje, se comercializa sustrato especial para bonsáis y kokedamas.
Lavado y poda de raíces
Se debe retirar la tierra de las raíces con suavidad, tratando de no lastimarlas. Se lavan y se corta el exceso para que la planta quepa en la maceta. Una vez llena de tierra, hay que presionar para que no queden bolsas de aire.
Poda y modelado de Bonsai
Por naturaleza los arboles concentran su crecimiento en la parte superior y bordes exteriores, y son detalles a tenerse en cuenta a la hora de elegir el diseño y la formación del bonsái. La poda será siempre un poco más a fondo en estos sectores claves del árbol.
Poda de mantenimiento
Es para mantener y perfeccionar la forma del árbol, es una poda que se conoce como pinzado y quita las partes con mayor crecimiento (superior y bordes externos). Se realiza durante la temporada de crecimiento del árbol.
Para efectuarla hay que cortar los crecimientos largos longitudinales de las ramas que salen del perfil del follaje.
En los árboles de hoja se emplean tijeras afiladas mientras que en el caso de bonsái de pinos y coníferas se usan los dedos.
Otro método para reequilibrar las fuerzas de crecimiento del árbol y hacer que ramifique es el defoliado durante el verano. Simplemente se quitan las hojas para hacer que la planta forme un nuevo brote.
Como resultado se incrementa la ramificación porque de la base de las hojas salen además nuevos brotes.
Poda de formación
Para modelar y dar forma al árbol hay que podar ramas grandes, este proceso se realiza a principio de primavera y finales del otoño, que es justamente antes y después de la temporada de crecimiento.
Para darle forma al árbol hay que colocarlo a nivel de la vista, quitar las ramas muertas y decidir que diseño darle. A continuación quitarlas ramas que no cuadren con esta forma.
Pautas básicas:
- Si hay dos ramas creciendo a la misma altura, mantener una y eliminar la otra.
- Quitar las ramas verticales y gruesas que no se puedan doblar.
- Eliminar las ramas con vueltas y giros que no se vean naturales.
- Quitar las ramas que tapen la parte frontal del tronco.
- Podar las ramas muy gruesas que se encuentren en la zona apical, para mantener la armonía y que las de la parte baja tengan mayor calibre que las altas.
Para podar las ramas gruesas conviene emplear una podadora cóncava para minimizar la herida y que sane más rápido. También es necesario colocar una pasta selladora sobre las lesiones grandes de poda, esto protege al árbol de infecciones y hacer que selle más rápido.
Alambrado
El alambrado se usa para dar forma al bonsái, por lo general se realiza con alambre de aluminio anodizado o cobre recocido, y se lo enrolla alrededor de las ramas para poder doblarlas y formarlas.
Lo ideal es hacerlo cuando las ramas están flexibles (por lo general en invierno), y retirar el alambre cuando las ramas crecen para evitar que se clave en ellas.
También puede interesarte: Cómo cuidar un bonsái: nociones básicas y primeros pasos
Fuente: Bonsai Empire