Hierbas aromáticas: La alcaravea (Carum carvi)

La alcaravea (Carum carvi) es una especie originaria de Europa, Medio Oriente y África del Norte que puede cultivarse fácilmente en casa para ser aprovechada para aromatizar distintos tipos de alimentos o como planta medicinal, aprovechando sus principios activos.

Se trata de una hierba bienal que desarrolla un follaje frondoso en su primer año en el jardín y lleva flores blancas y semillas el segundo año. Las semillas son más comúnmente usadas para saborizar el pan de centeno y otros similares, pero todas las partes de la planta son comestibles.

La alcaravea, conocida también como caravai, luce hojas de color verde brillante, hojas verde brillante, finamente divididas y de aspecto plumoso. Cada planta suele crecer hasta alcanzar entre 15 y 30 centímetros de altura por 45 centímetros de diámetro. El tallo floral supera ampliamente al resto de la planta, y durante el verano se puebla de pequeñas flores blancas que surgen en racimos.

Estos especímenes producen frutos secos o semillas de forma elipsoide de 3 a 6 milímetros de largo y de color pardo, con 5 pálidos surcos longitudinales sobre su superficie. La raíz de esta planta tiene un sabor aromático que recuerda al apio o la zanahoria.

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La alcaravea se desarrolla y crece mejor en un lugar a pleno sol y con un suelo rico y bien drenado, con rangos de pH de 6,5 a 7,0. No es una buena planta para climas cálidos y húmedos y prefiere las zonas templadas frías, y posee una gran tolerancia a la sequía.

Es una planta que no demanda mucho trabajo de mantenimiento y puede cultivarse sin inconvenientes en macetas y otros tipos de contenedores.

La multiplicación de la alcaravea se lleva a cabo a través de sus semillas que se siembran a 1,27 centímetros de profundidad durante el otoño o la primavera.

Una vez que la semilla germina, conviene dejar un margen de separación de 30 centímetros entre cada plántula. En climas más fríos, conviene proteger las raíces acolchando el suelo con paja o mantillo orgánico, lo que también sirve para agregar nutrientes al sustrato.

Si bien esta especie requiere pocos cuidados, es importante tener en cuenta que mantener los niveles adecuados de humedad representa un componente vital durante el primer año de vida de una planta de alcaravea. Su follaje debe mantenerse seco durante el riego, por lo que se recomienda utilizar una manguera de goteo. Aunque se trate de una especie tolerante a las sequías, no debe dejarse que el suelo se seque por completo entre cada riego.

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Alcaravea (Carum carvi): Aprovechamiento como planta comestible

El cultivo de esta hierba puede proporcionar una fuente fresca de una especia que es adaptable y que puede almacenarse por mucho tiempo. Todas las partes de la planta de alcaravea son comestibles.

Las hojas, por ejemplo, pueden cosecharse en el primer o segundo año para agregar sabor a las ensaladas. Cuando la planta ha producido semillas, se puede desenterrar la raíz y utilizarla como se haría con cualquier vegetal de raíz. Las semillas se cosechan cuando adquieren un color marrón oscuro.

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Ruben
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