El saskatun (Amelanchier alnifolia) es una especie originaria de América del Norte, donde también es conocida como fresa de junio occidental, que se aprovecha en jardinería como arbusto o árbol ornamental debido a que ofrece una atractiva variedad cromática durante las distintas estaciones del año.
Se trata de un pequeño árbol de hoja caduca que a menudo crece hasta alcanzar entre los 1 y 8 metros de alto, aunque existen algunos especímenes capaces de alcanzar los 10 metros. El follaje de esta especie está conformado por hojas dentadas, redondeadas y azuladas con verde grisáceo, colores que luego pasan a brillantes tonos de amarillo y burdeos. Usualmente cada una de ellas mide de 2 a 5 centímetros de largo por 1 a 4,5 centímetros de ancho.
A principios de la primavera, antes de que las flores aparezcan, el saskatun produce masas de llamativas y ligeramente fragantes flores blancas, con cinco pétalos bastante separados, de 3 centímetros de ancho, sostenidas de a veinte en racimos verticales.
Atractivas para los polinizadores, las flores son seguidas por abundantes bayas comestibles de color púrpura oscuro en verano que miden 5 a 15 milímetros de diámetro. Al igual que los arándanos, estas bayas se pueden aprovechar para la elaboración de jaleas o mermeladas y son muy apreciados por los pájaros y seres humanos.
Apto para cultivarse tanto a pleno sol como bajo sombra parcial, el saskatun crece y se desarrolla fácilmente en suelos húmedos, bien drenados y ácidos. La mejor producción de la baya y de color del follaje se producen cuando la planta se ubica en pleno sol. También es tolerante a condiciones secas o alcalinas una vez establecido y posee una buena resistencia a la sequía.
Además de su valor ornamental, este arbusto o árbol pequeño sirve como excelente rompevientos cuando se plantan varios ejemplares lo bastante reunidos como para que las ramas se entrelacen para formar un cerco vivo.
Propagación del saskatun (Amelanchier alnifolia)
El cultivo de saskatun se puede iniciar de varias maneras diferentes, incluyendo a partir de semillas, retoños, esquejes de raíz, estacas de madera blanda, recortes de brotes, y la división de la corona. Las ramitas de esta planta también pueden injertarse en otros árboles como los manzaneros y perales.
Si bien los ejemplares de esta especie son muy resistentes, conviene evitar su cultivo en zonas donde suelan registrarse heladas tardías. No tienen altos requerimientos de nutrición, aunque la incorporación de compost al suelo antes de la siembra ayudará a mantener la humedad del mismo mientras la planta se establece. Durante la etapa de crecimiento y establecimiento es importante controlar las malas hierbas alrededor de los arbustos jóvenes.
