La Thypa latifolia es aparentemente una de las plantas acuáticas que más apodos ha recibido, despendiendo de la zona en que se encuentre. Totora, espadaña, enea de hoja ancha, bayunco, plumino, y junco de la pasión son algunos de los nombres con que es conocida popularmente esta especie originaria de las zonas pantanosas del hemisferio norte.
Se trata de una planta herbácea perenne del género Thypa, que enraiza firmemente bajo el agua, en el fondo de espejos o cursos de agua lentos. Desarrolla rizomas subterráneos que le pemiten extenderse y constituir grandes poblaciones en las orillas de lagunas, arroyos mansos, pantanos, esteros, etc.
Las hojas basales de la totora tienen forma de cinta larga y pueden medir hasta 2 metros de altura por 2 centímetros de ancho, con un atractivo color verde con tonos de azul, aunque existen variedades capaces de producir hojas variegadas.
Los largos tallos culminan en una inflorescencia constituida en su parte más baja por una espiga cilíndrica compacta de color marrón, lo que le da un aspecto similar a un puro habano grueso. Esta porción alberga a las flores femeninas.
En la parte inmediatamente superior se encuentran las flores masculinas, reunidas en un tramo final más delgado y de tono más claro.
Esta floración, que tiene lugar de mediados a fines del verano, es uno de los motivos que convierte a la totora en una planta muy buscada para ornamentar estanques u otra clase de jardínes acuáticos de grandes extensiones. En algunas zonas, sobre todo en el ámbito rural, las flores femeninas son aprovechadas para ahuyentar a los mosquitos.
La especie también puede ser aprovechada desde el punto de vista culinario, debido a que la base blanca del tallo joven de la totora es comestible. Lo mismo sucede con los rizomas gruesos, que pueden cocinarse como papas o procesarse para la elaboración de harina.
Como se trata de una planta de rápido crecimiento y propagación, puede convertirse en una especie invasora si no se controla su desarrollo o si se la cultiva en áreas poco extensas.
Los rizomas pueden enterrarse en el fondo de las orillas donde haya una profunidad aproximada de 40 centímetros. Gracias a su resistencia, la totora no es muy exigente en materia de suelos y es capaz de tolerar una amplia variedad de temperaturas.
Totora: Cuidados especiales y multiplicación
Prácticamente el único cuidado especial que demandan las plantas de esta especie es la necesidad de una buena aireación del agua, para mantener niveles adecuados de oxígeno.
La técnica más usada para multiplicar la totora es por división de los rizomas después de que las flores se marchitaron totalmente, cosa que suele suceder al terminar la temporada estival.
No debe confundirse esta planta con otra especie que comparte algunos de sus nombres comunes, que es la Schoenoplectus californicus, una hierba perenne también acuática que se utiliza principalmente para la elaboración de artesanías y la construcción de viviendas y embarcaciones en América del Sur.
Me interesa conseguir semilla de esta planta, gracias