Acumular el agua en un barril de lluvia para su uso en el riego de jardines y árboles es una técnica interesante, no sólo porque ayuda a reducir el consumo del agua proveniente de red, sino también por la relativa facilidad de su instalación en prácticamente cualquier vivienda.
Para instalar un barril de lluvia se necesita una buena inversión de voluntad y tiempo, además de unos pocos materiales y herramientas.
Sobre todo, se precisa obtener un tambor, bidón o barril plástico de 200 litros, ya sea nuevo o reciclado, asegurándose de que el mismo no haya sido utilizado para almacenar productos químicos. Además, se necesita contar con dos o cuatro ladrillos huecos o bloques de concreto, un trozo de malla de alambre, y una llave de nariz o grifo con cabeza en ángulo.
En cuanto a las herramientas a utilizarse, se requiere contar con un taladro con un accesorio para hacer perforaciones de por lo menos 15 centímetros de diámetro y una mecha de 15 o 116 pulgadas.
El primer paso consiste en limpiar el interior del barril de lluvia, enjuagándolo con agua y cloro. Una vez hecho esto, con el taladro se procede a hacer un agujero de 15 o 16 pulgadas en la parte inferior del tambor (a 3 o 10 centímetros de la base), donde se instalará el grifo que deberá dejarse bien ajustado y sellado.
A continuación, con los bloques de concreto se arma una plataforma sobre la que se colocará el barril, para que la elevación ayude a mejorar la presión de salida del agua, facilitando el uso de mangueras.
El bidón y su base deben ubicarse donde termina la canaleta de desagüe del techo, asegurándose de que la misma termine antes de que llegue al borde del contenedor.
El siguiente paso es taladrar la tapa del barril, haciendo un agujero de 15 centímetros de diámetro, que será la boca de entrada del agua de lluvia. Para impedir el ingreso de basura, tierra, hojas o insectos, se coloca un pedazo de tela de alambre o malla mosquitera para que cumpla la función de filtro.
En forma opcional, se puede instalar una válvula de salida o un segundo grifo cerca del borde superior del barril, para evitar el exceso de acumulación de agua y los consecuentes desbordes. Otra solución para este problema consiste simplemente en desconectar el barril de la caída de la canaleta, de manera intermitente durante la época de lluvias.
También se aconseja desconectar el tambor durante el invierno, ya que existe el riesgo de acumulaciones de hielo que pueden terminar dañando el sistema.
En el caso de aquellas viviendas que no cuenten con un sistema de canaletas de desagüe de techos, se puede recurrir al uso de barriles de tapa abierta en los que se recolecta el agua de lluvia que cae directamente sobre el contenedor. Para ello, sólo se debe reemplazar la tapa con una malla mosquitera bien atornillada a la parte superior del contenedor, y asegurada con un cordón elástico o de goma.
En todos los casos, se recomienda revisar el bidón periódicamente, para verificar que no hayan ingresado residuos o se produzcan focos de incubación de insectos.
Es importante destacar que el barril de lluvia debe destinarse principalmente para recolectar agua para riego o para lavado de coches o ventanas, no para beber, cocinar o bañarse.
En el siguiente video puede verse un método de fabricación de barril de lluvia:
httpv://www.youtube.com/watch?v=MGFDlkJOdaM&feature=player_embedded
