Espinaca (Spinacia oleracea): Cultivo, riego y cuidados

La espinaca (Spinacia oleracea) es una especie hortícola originaria del Sudoeste Asiático  cuyo cultivo y consumo se ha extendido al resto del mundo, gracias a sus sabrosas hojas y a su aspecto estético.

Se trata de una planta anual, perteneciente a la familia de las Quenopodiáceas, al igual que la acelga y la remolacha, y es muy rica en vitaminas A y E, yodo y varios antioxidantes.

bonnie plants espinaca
Foto. Bonnie Plants

Se desarrolla inicialmente en forma de roseta con un tallo muy corto, que se separa poco del suelo y del cual brotan hojas de color verde medio a oscuro, con un pecíolo generalmente de color rojizo. Luego de la etapa de roseta, el tallo de la planta de espinaca comienza a crecer hasta alcanzar aproximadamente un metro de altura.

Las flores de esta especie se desarrollan en las axilas de la hojas a lo largo del tallo. Es posible encontrarse con plantas con flores masculinas, otras con flores femeninas, y otras hermafroditas.

El desarrollo y crecimiento de la espinaca depende mucho de las condiciones de temperatura, siendo el marco ambiental óptimo el comprendido entre los 15ºC y 18ºC, y es capaz de tolerar hasta una máxima de 24ºC y una mínima de 5ºC sin limitar su crecimiento y desarrollo.

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Si bien resiste muy bajas temperaturas (hasta -10ºC), éstas pueden demorar e incluso detener totalmente el crecimiento de la planta. En el otro extremo, los registros superiores a los 26ºC suelen inhibir el proceso de germinación en su totalidad.

El cultivo de la espinaca tiene más posibilidades de prosperar si se realiza en suelos con altos niveles de materia orgánica, profundos y bien drenados. En pequeños huertos o maceteros se recomienda agregar una cantidad generosa de compost a la tierra.

Es importante evitar su cultivo en suelos demasiado húmedos, ácidos o excesivamente alcalinos. En el caso de los sustratos con altos niveles de acidez, los mismos podrían equilibrarse con aportes de cal.

Las semillas de espinaca se siembran generalmente en otoño e invierno, echándolas directamente sobre al suelo al voleo o en líneas separadas entre sí por un espacio de 30 centímetros. En zonas donde se registran inviernos muy duros es conveniente sembrar durante la primavera.

La profundidad de siembra recomendada no debe superar los 3 centímetros. La germinación comienza usualmente a los 20 días cuando la temperatura ambiente ronda los 6ºC. Si el termómetro supera ese nivel, es muy probable que las semillas demoren en germinar.

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Una vez que salieron a la superficie y, si se detecta que las espinacas se encuentran muy apretadas, deberá aplicarse un primer raleo para dejar un margen de separación de unos 7 centímetros entre plántula. Posteriormente, cuando hayan crecido un poco más, se debe aclarar nuevamente, a fin de dejarlas separadas por alrededor de 20 centímetros.

Espinaca: Necesidades de riego y cosecha

La espinaca es poco exigente en cuanto al agua. Durante la primavera es necesario mantener un riego regular, ya que esa es la temporada en la que la planta crece activamente. Posteriormente se irá reduciendo la frecuencia de las aplicaciones.

espinaca var. tucan

La cosecha se realiza cuando la planta ha desarrollado más de 5 hojas y hasta que comienza a fomar las varas florales. El ciclo aproximado entre la siembra y la última cosecha puede ser de 70 a 90 días.

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Ruben
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