La feijoa (Acca sellowiana), también conocida comúnmente como guayabo del país, es una planta originaria de Brasil, Argentina, Uruguay y Colombia, que se cultiva ampliamente como árbol ornamental de jardín y como especie frutal.
Se trata de una especie arbustiva y ramificada, capaz de alcanzar una altura máxima de 4 metros, aunque hay registros de ejemplares que crecieron hasta rozar los 7 metros de alto. Se caracteriza poseer una corteza de color grisáceo y textura áspera.
Las hojas de esta planta son simples, opuestas, pecioladas, con pecíolos de 4 a 8 milímetros, ovoides o elípticas, de color verde oscuro y brillantes en el haz, blanquecinas en el envés.
En primavera, la feijoa produce flores solitarias con 4 sépalos y 4 pétalos de color blanco-róseos, con estambres numerosos con anteras de color amarillo intenso o rojo. La polinización es realizada por pájaros y por insectos, especialmente las abejas.
Las flores de esta especie son comestibles, y a finales del verano o durante el otoño son seguidos por un fruto que consiste en una baya oblonga de 4 a 7 centímetros de largo por 3 a 5 centímetros de ancho, y que adquiere un color verde oscuro en la madurez, con aromas agradables propios. La pulpa del fruto es carnosa, blancuzca o amarillenta, y fragante. Es comestible, rica en vitamina C y con ella se preparan bebidas, jaleas, helados y mermeladas.
La masa interior del fruto es jugosa y se divide en una pulpa clara y gelatinosa que envuelve las semillas y una parte carnosa más firme, ligeramente granular, opaca, más cerca de la piel. Los frutos caen al suelo cuando están maduros y a su máximo sabor, pero puede ser recogidos del árbol antes de caer para evitar golpes que arruinen su calidad.
Aparte de su finalidad gastronómica, la feijoa se utiliza en algunos productos cosméticos naturales como exfoliante.
Al momento de plantearse el cultivo de esta planta arbustiva, debe tenerse en cuenta que se trata de una especie resistente al frío. De hecho, la fruta sabe mejor cuando el árbol está expuesto a bajas temperaturas. Sin embargo, no soporta aquellos ambientes en los que se registran niveles inferiores a los -12°C. También es sensible a las temperaturas muy elevadas y a la excesiva sequedad del aire.
Feijoa (Acca sellowiana): Exposición, riego y fertilización
La feijoa crece y se desarrolla bien a pleno sol o sombra parcial. Prefiere una tierra rica, orgánica y bien drenada con un pH ácido o ligeramente alcalino. Cuando el pH es demasiado alto, las hojas se vuelven amarillas. Los árboles recién plantados y jóvenes necesitan riego semanal en ausencia de lluvia. A medida que el árbol madura, su tolerancia a la sequía aumenta.
Este árbol necesita una fertilización ligera cada dos meses en la mayoría de los suelos. Se recomienda aplicar aproximadamente la mitad de la cantidad recomendada de fertilizante 8-8-8, dependiendo del tamaño del árbol. Para un resultado más satisfactorio, conviene labrar la superficie del suelo y regar profundamente para distribuir mejor el fertilizante.
