Aromatizan comidas, postres e infusiones, y tenerlas plantadas en el balcón proporcionan un plus de placer, un delicado panorama olfativo para despertar sentidos. Menta, orégano, lavanda y albahaca son las propuestas que en esta oportunidad ofrecemos, sencillas de mantener e infalibles en la cocina y el corazón.
Además, ante la inquietud de si utilizar semillas o plantines, te facilitamos algunas propuestas que despejarán tus dudas:
Cultivo de menta en maceta:
Esta aromática se emplea en postres, infusiones y recetas frescas y novedosas. Su presencia en los jardines evita plagas en sus vecinas plantas. La menta es una hierba amable, que crece y se propaga con facilidad en invierno o verano, y que puede plantarse directamente desde la semilla, o mediante plantines.
Si la opción es plantar menta con semillas, lo ideal es hacerlo a fin de verano o apenas empezado el otoño. Tanto si se usan semillas como plantines, es aconsejable usar una maceta de unos 20 o 25 cm de profundidad, con un buen sistema de drenaje.
Cultivo de albahaca mediante plantines
Ofrecemos este paso, dado que es más rápido y efectivo que plantar la albahaca desde las semillas. Si bien esta planta es más delicada que la menta, con los cuidados precisos es posible conservarla y aprovechar sus bondades directamente en el balcón de casa. Por empezar, la albahaca necesita sol, y necesita riego diario, y así y todo cada año será preciso volver a plantarla, por ser una planta anual.
Otro cuidado importante es la preservación del frío y las heladas. Pero volviendo al cultivo: las macetas deben ser bastante profundas, de modo que permitan un agujero de quince centímetros a la hora de introducir los plantines. Al hacerlo, es importante que no se doblen las delicadas raíces. Las hojas de albahaca son esenciales en el pesto, y su presencia en el jardín también -al igual que pasa con la menta- repele insectos dañinos.
Orégano en el balcón
La maravilla del orégano fresco en las ensaladas puede formar parte de la cotidianeidad mediante unos sencillos pasos. Básicamente, ya sea mediante semillas o plantines, lo que necesita esta bondadosa planta es sol y un drenaje adecuado. Por su adaptabilidad, no requiere abonos especiales.
Lavanda en casa
El aroma de la lavanda se emplea tanto para aliviar tensiones como para repeler mosquitos. Una maceta con lavanda alegra la vista, dado que sus flores lilas son muy hermosas y delicadas. Esta hierba precisa mucho sol, y macetas profundas. Por lo demás, se adapta de maravillas a todos los climas, aunque se recomienda plantarla mediante plantines en primavera.
