El pistachero (Pistacia vera) es un pequeño árbol nativo de las zonas montañosas de la zona oriental del Mediterráneo y de Asia Central, conocido en todo el mundo gracias a su fruto para uso culinario llamado pistacho, pistache o alfóncigo.
Se trata de una planta desértica que puede crecer hasta alcanzar los 10 metros de alto. Sus hojas pinnadas, compuestas por tres a cinco foliolos de hasta 20 centímetros de longitud, suelen desprenderse durante la época más fría del año.
Las plantas de pistachero son dioicas, es decir que tienen pies masculinos y femeninos separados. Las flores son apétalas y se reúnen en racimos. El fruto es una drupa que contiene una semilla alargada.
El mismo se encuentra cubierto por una piel carnosa fina, de color verde. En su interior, bajo una cáscara dura y blanquecina, la semilla, de un color verde pálido, está cubierta a su vez por una piel fina de tono malva y tiene un sabor característico.
Esa semilla es, precisamente, el famoso pistacho, que no sólo se destaca por ser el más bajo en calorías de las nueces, sino que es rico en fitoesteroles, antioxidantes, grasas insaturadas, carotenoides, vitaminas y minerales, y fibra.
Por tratarse de una especie originaria de regiones desérticas, el pistachero tiene una alta tolerancia al suelo salino y puede sobrevivir a temperaturas que van de -10ºC en invierno, hasta 40ºC en verano.
Los árboles de esta especie no crecen bien en condiciones de alta humedad, por lo que sus raíces pueden pudrirse durante el invierno si reciben demasiada agua y el suelo no tiene un buen drenaje. Asimismo, requieren largos veranos para la adecuada maduración del fruto.
El clima es crucial cuando se cultivan los pistacheros. Las temperaturas ideales son superiores a 38ºC durante el día. También necesitan meses de invierno lo suficientemente fríos como para completar su período de latencia (7 ºC o inferior).
Así como es exigente con sus requisitos de temperatura, el pistachero por otra parte es poco exigente en lo que se refiere al tipo de suelo, aunque realmente prospera en sustratos franco arenosos profundos. En terrenos bien drenados puede recibir riegos profundos pero infrecuentes.
Cultivo de pistacheros en contenedores
Aunque los ejemplares de esta especie son de larga vida, desarrollan grandes raíces y pueden crecer considerablemente, las plántulas pueden cultivarse en contenedores durante los primeros tres o cinco años y luego trasplantadas en el jardín.
En ese espacio verde o en el huerto, los árboles deben ser plantados a 6 metros de distancia. Como se señaló previamente, los pistacheros son dioicos, por lo que para obtener un buen sistema de cultivo se necesita cultivar especímenes machos y hembras.
Dado que estos árboles se clasifican árboles frutales, la poda del pistachero es importante para la producción de fruta de mayor calidad mientras se controla el crecimiento.
