Los almendros son un tipo de árbol muy popular. Aunque son originarios de Asia, es muy común también en aquellas zonas cálidas del Mediterráneo.
Una de sus variantes más importantes posee unas hermosas flores de color blanco; pero, también tienen flores de color rosado. Este hecho es característico de cada una de las especies de dicho árbol. Cuando estamos ante un árbol joven, su tronco es de color amarillo; mientras que cuando es un árbol más adulto, tiene un tronco más agrietado, escamoso y de un característico color gris.
El mejor tipo de riego para este tipo de arboles, sin duda, es el goteo, pues el agua va de forma directa a la raíz. Es destacable notar que el almendro necesita mucha agua para lograr su correcto crecimiento y que florezca.
La poda debe realizarse justo después de recoger las almendras, que suele ser alrededor de la estación otoñal. Las flores de este árbol son famosas por su belleza y florecen a finales de invierno y a inicios de la estación de la primavera.
El Almendro sufre de varias plagas, que se suelen convertir en una enfermedad en muchas ocasiones. Entre algunas de estas tenemos el pulgón, el chancro, la roya de almendro el gusano cabezudo. Este tipo de árboles tienen que estar en un jardín, pues ya sea por sus dimensiones, que son bastante grandes o por la cantidad de agua y luz que necesitan para su crecimiento, no pueden estar en el interior.
